Erazo-Panduro, M. et al.
2 Rev. cient. sist. inform. 2(2): e385; (jul-dic, 2022). e-ISSN: 2709-992X
1. INTRODUCCIÓN
La pandemia de la Covid-19 ha impacto en la economía global, siendo los más afectados las Micro y
Pequeñas Empresas (Mypes), quienes evidenciaron vulnerabilidad digital ante las actuales demandas de
los consumidores (Esteban-Navarro et al., 2020). De acuerdo a Inga-Ávila et al. (2022), las Mypes de
diferentes sectores tuvieron que ajustar sus procesos para permanecer en el mercado competitivo
mediante la articulación de políticas tecnológicas y mejora de capacidades de reacción y adaptación.
En este marco, los recursos humanos – propietarios, gerentes o empleados – han experimentado barreras
para afrontar el comercio cambiante; exhibiendo deficientes habilidades y capacidades en el uso de las
Tecnologías de Información y Comunicación (TIC), sea para el trabajo remoto, implementación de
tecnologías de información, generación de mecanismos de comunicación, o gestión de relaciones con los
clientes y proveedores (Cuesta Santos & Lopes Martínez, 2020; Guzmán Duque & Gutiérrez Rojas, 2018;
Inga-Ávila et al., 2022)
Según Vizalote-Rodriguez (2022), mediante una revisión sistemática, la incertidumbre de las Mypes de
reemplazar la mano de obra por las tecnologías de la información obstaculiza la automatización o
sistematización de los procesos, generando baja productividad, flexibilidad y sostenibilidad. Realidad que
puede deberse a los desafíos que conlleva la implementación de herramientas digitales como la
vulnerabilidad a delitos informáticos, violación de datos sensibles, mayor inversión, reducción de valor de
mercado, etc.
En México, Cruz Coria (2021), afirma que gran parte de los microempresarios tuvieron dificultades para
hacer frente a la situación de la pandemia, teniendo complicaciones para el desarrollo de estrategias
empresariales que adoptaran el uso de soluciones digitales para comercializar sus productos o servicios;
como el uso de las redes sociales o sistemas de ventas por internet, ocasionando incluso el cierre comercial;
dado a las bajas competencias digitales de los propietarios que reflejaron en sus organizaciones ineficiencia
para afrontar la adversidad.
En el contexto peruano, Osorio Chavez et al. (2022), manifiestan que más del 50% de las organizaciones no
han logrado posicionarse en el mercado debido a la baja práctica del uso de herramientas digitales,
específicamente del marketing digital, poniendo en riesgo su permanencia en el mercado. Los autores
aluden asimismo que el impacto de la pandemia aún persiste, y son las Mypes quienes deben implementar
buenas prácticas de comercio digital a fin de optimizar el desempeño empresarial.
Ahora bien, las Mypes en el Perú, para el 2020, alcanzaron ventas equivalentes al 8% del PBI, dirigidos por
el 95% de los empleadores. La región San Martín, presentó una correlación alta entre el índice de capacidad
formal y el desempeño financiero, siendo una de los departamentos con aumento de ingresos de ventas y
formalización de negocios (COMEXPERU, 2020). Sin embargo, se desconoce actualmente información que
refleje las capacidades de los propietarios para la adopción y manejo de las TIC, incorporación en sus
procesos y mejora de la productividad empresarial.
Bajo este panorama, el estudio buscó determinar el nivel de las competencias digitales de las Mypes
peruanas de la región San Martín en época de pos covid-19, enfocado en el conocimiento del
funcionamiento genérico de las TIC, conocimiento de herramientas digitales específicas, uso de
herramientas tecnológicas y acceso a la información.
2. MATERIALES Y MÉTODOS
Se optó por una investigación básica de nivel descriptivo, no experimental de corte transversal, ya que se
propuso fortalecer y ampliar teorías existentes, las variables no fueron controladas y los datos se
recopilaron en un único momento (Hernandez Sampieri et al., 2014).