Vela-Vásquez, T. et al.
2 Rev. Cient. Epistem. Tekne. 1(2): e372; (jul-dic, 2022). e-ISSN: 2810-8833
1. INTRODUCCIÓN
El estudio es el ejercicio o esfuerzo y voluntad que tiene el estudiante cuando se encuentra frente a tareas
académicas para comprender o aprender, a esto se complementa la aplicación de diversas herramientas
uno de ellos son las técnicas de estudio. El aprender de memoria todo un texto es cosa del pasado, por ello
es importante la aplicación de las técnicas de estudio para el estudiante y pueda obtener buenos resultados
en su rendimiento académico, cualquiera que fuera el nivel de estudio y la materia de estudio.
Las técnicas de estudio, actualmente es considerado como las herramientas más importantes en el proceso
del aprendizaje, necesidad con que debe contar las personas para facilitar el trabajo académico, siendo
importante rescatar que cada estudiante es una realidad distinta, por lo tanto cada uno tiene su forma
particular de estudiar, sin embargo existen estudiantes por más que se dediquen a estudiar no hay un
resultado de buenas calificaciones , siendo el momento de saber qué hacer para que pueda aprender
significativamente (Pérez González, 2017).
Asimismo, Gutierrez-Vasquez (2008), sostiene que las técnicas de estudio son “competencias complejas,
formadas por estrategias más simples. A su vez, la estrategia está formada por competencias organizadas,
que se utilizan con la finalidad de realizar una tarea con un propósito definido, en este caso aprender”
(Enríquez Villota et al., 2015). De las cuales es importante mencionar algunas técnicas de estudio para
facilitar los procesos mentales relacionados con el conocimiento y que es un soporte para el estudiante
toda vez que procesa la información y estas son el uso del horario, manejo de estructura del texto,
subrayado, hábitos de estudio, el uso de apuntes, la motivación, preparación para exámenes, hábitos de
estudio y la atención.
Para Venet-Muñoz & Carbo-Ramírez (2017) las técnicas son tan importantes para los procesos de carácter
intelectual y cognitivo que fortalece el aprendizaje del estudiante, asimismo para hacer frente ante los
exámenes, igualmente la organización y administración del tiempo. Cabe señalar, que la elección de
materiales, guías didácticas deben ser pertinente para que un estudio tenga buenos resultados.
Es importante que los docentes también tengan en cuenta como elemento principal el estado emocional del
estudiante y si la situación se da por brindar las mejores técnicas y métodos de estudio de parte de los
docentes, el estudio siempre será un fracaso, debido que el estudiante no está en la disposición de estudiar
y seguirán reproduciendo en las aulas los mismos métodos de enseñanza y aprendizaje. En tal sentido es
una frustración, tanto para los docentes y estudiantes. El bienestar emocional de la persona se caracteriza
por sentirse bien, en armonía consigo mismo y con las personas para afrontar tensiones normales de la
vida de manera equilibrada, caso contrario, el estudiante puede llegar al cuadro de ansiedad.
Desde el enfoque dual de Liebert & Morris (1967) y Spielberger (2010), la ansiedad está compuesta por
dos dimensiones, una fisiológica (Emocionalidad) y otra cognitiva (Preocupación) (Dominguez-Lara,
2016). La primera “Emocionalidad” también conocida como elemento fisiológico o afectivo, tensión
manifestada durante la evaluación de parte del estudiante. Al respecto, la “preocupación”, conocido como
el elemento cognoscitivo, es decir, “son los pensamientos recurrentes sobre las consecuencias personales
o sociales, de un potencial mal desempeño en el examen” (Dominguez-Lara, 2016).
Para Polo Herrera et al. (2022) la ansiedad ante los exámenes es parte de la experiencia que pasa el sujeto
acompañado de síntomas que generan distracción en la atención y pensamientos negativos, lo que le
impide razonar ante un examen académico. De esta manera, el estudiante experimentará el grado de más
o menos ansiedad, dependiendo de la asignatura, examen o exposición (Dominguez-Lara, 2016).
Asimismo, Ruiz-Segarra (2020) considera que un examen es un evento amenazante y por tanto son
elevados los niveles de ansiedad y que puede llegar a respuestas inapropiadas y manifestadas a través de
una paralización, evitación o dificultad para recordar lo aprendido. Esto implica, para Melgosa (2019) “un